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  • Dr. Daniel Diaz | Obesidad, Trastornos Metabólicos y Hormonales

    Por más que lo intentas, ¿no logras bajar de peso? ¿Sabías que miles de personas no pueden perder peso debido a algún un problema hormonal, un control hormonal inadecuado, o bien a una mala orientación sobre la forma en la que se alimentan y no lo saben? Afortunadamente existe una solución. Quiero agendar mi cita Este método es para ti Este método es para ti Este método es para ti Si no puedes bajar de peso Llevas tiempo intentándolo y no lo has logrado. Si tienes un problema hormonal Y no está bien controlado o crees que puedas tener un problema hormonal y requieres de un profesional que te apoye. Si vuelves a recuperar tu peso Una vez que suspendes los tratamientos vuelves a recuperar el peso que habías perdido. Quiero agendar mi cita Acerca del Dr. Daniel Díaz Acerca del Dr. Daniel Díaz Acerca del Dr. Daniel Díaz Cuenta con más de 20 años de experiencia en el manejo y control del sobrepeso y la obesidad así como enfermedades asociadas como diabetes, hipertensión, dislipidemias, síndrome metabólico, hígado graso, problemas tiroideos, problemas articulares, apnea obstructiva del sueño, ovarios poliquísticos, problemas de fertilidad relacionados con el aumento de peso corporal, alteraciones en la inmunidad entre muchos otros más. Miembro del Top 100 Lideres de la Salud 2024 Miembro del Top 100 Lideres de la Salud 2024 Miembro del Top 100 Lideres de la Salud 2024 de la revista Destacados Lideres México de la revista Destacados Lideres México de la revista Destacados Lideres México Autor del libro Autor del libro Autor del libro Obesidad 0% Obesidad 0% Obesidad 0% y otros artículos médicos. y otros artículos médicos. y otros artículos médicos. Quiero agendar mi cita ¿Qué opinan sus pacientes? ¿Qué opinan sus pacientes? ¿Qué opinan sus pacientes? Motivación Motivación Motivación Experiencia Quiero agendar mi cita Que incluye el plan Balance Que incluye el plan Balance Que incluye el plan Balance Consulta con médico especialista Asesoria nutricional personalizada 2 envases de suplementos alimenticios para 15 días de tratamiento, como apoyo en la pérdida de grasa corporal. Acceso a portal web con herramientas de apoyo. Envío por paqueteria de suplementos (cuando la consulta es en línea) Acceso a recetario especial primeras semanas. (BONUS) eBook "Tengo un problema en mi tiroides, guía práctica". (BONUS) Plan Balance Plan Balance Plan Balance 1500 TAN SOLO Quiero agendar mi cita

  • Especialista en obesidad | OB City health

    OB City health Especialista en Obesidad Sistema único integral para tratar la obesidad y problemas de salud asociados a ella. Más de 20 años de experiencia, calidad y calidez en la atención a miles de personas satisfechas. Curriculum Libros Artículos Blog Redes Dr. Daniel Díaz Cuenta con más de 20 años de experiencia en el manejo y control del sobrepeso y la obesidad así como enfermedades asociadas como diabetes, hipertensión, dislipidemias, síndrome metabólico, hígado graso, problemas tiroideos, problemas articulares, apnea obstructiva del sueño, ovarios poliquísticos, problemas de fertilidad relacionados con el aumento de peso corporal, alteraciones en la inmunidad entre muchos otros más. SABER MÁS Servicios Los diferentes servicios que se ofrecen tendrán la finalidad de ayudarle a alcanzar sus metas buscando la mayor comodidad y practicidad para que usted solo se ocupe de lograr su objetivo y optimizar su salud. Conoce más Consulta en línea y presencial Podrás tener tu consulta y seguimiento de forma presencial o en línea. Conoce más CASOS DE EXITO Conoce más TESTIMONIOS Conoce más no es el qué SINO EL CÓMO Conoce mi libro Beneficios Los beneficios con los cuales contaremos son importantes al elegir un sistema que nos ayudará a alcanzar nuestras metas y mejorar nuestra salud. Un plan que funciona Nuestros planes se adaptan a tus necesidades y expectativas. Conoce más Blog Conoce la relación y el impacto que tiene la obesidad en diferentes ámbitos y sistemas en tu cuerpo. Conoce más Dolor lumbar y sobrepeso Impacto de la obesidad en la presión arterial Apnea del sueño y obesidad ¿Conoce a alguien que ronca cuando duerme? Adicción a la comida. El ejercicio no basta para bajar de peso ¿Las vacunas te protegen igual si tienes sobrepeso u obesidad? Infertilidad y obesidad. Sobrepeso e hipotiroidismo Remisión de la Diabetes tipo 2 a través de la pérdida de peso con Dietas de Fórmula de MBC. El Mejor Momento Para Tomar Bebidas De Proteínas y Porque

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  • Dolor lumbar y sobrepeso

    ¿Quién no ha presentado en algún momento de su vida adulta un evento de dolor lumbar? La lumbalgia o dolor lumbar (DL) es una problema que afecta a gran parte de la población y se considera, junto con el dolor cervical, la principal causa de discapacidad en la mayoría de países. La prevalencia del dolor lumbar continúa creciendo y las personas suelen experimentar múltiples episodios después del primer evento. En nuestro país, el sobrepeso y la obesidad afectan a más del 75 % de las personas adultas, y al 35.6 % de la población infantil. Cifras que nos ubican como primer lugar a nivel mundial en obesidad infantil, y el segundo en adultos, superado solamente por los EE. UU. Diversos factores de riesgo aumentan la prevalencia de esta patología, como, por ejemplo: la edad, el tipo de trabajo u ocupación, el sexo femenino[4], así como el sobrepeso y la obesidad. Clasificación El dolor lumbar se puede clasificar según su duración en forma aguda (menos de 6 semanas), subaguda (entre 6 semanas y 3 meses) o crónica (más de 3 meses)[1], y según su causa, en dolor lumbar no específico o mecánico[2], o específico debido a patologías como neoplasias (tumores), estas ocurren en menos de un 15% de los casos[3]. El sobrepeso y el daño en la columna lumbar El sobrepeso se define como un IMC superior a 25 y menor a 29.9 kg/m2 y la obesidad como un IMC superior a 30 kg/m2. Es ampliamente aceptado que la carga adicional al sistema esquelético, como se ve en la obesidad, produce una alteración en la mecánica corporal que afecta desfavorablemente la función de las articulaciones. La obesidad se ha identificado como un factor de riesgo principal para el inicio y la progresión de la osteoartritis en las articulaciones que soportan carga en nuestro cuerpo, principalmente en la columna, la cadera, la rodilla y el tobillo.[5] El dolor lumbar así como la radiculopatía lumbar (causante frecuente del dolor conocido como ciática) son una consecuencia muy frecuente en pacientes que padecen sobrepeso y obesidad. Mecanismos de daño metabólico El tejido graso es un órgano muy importante que produce hormonas y diversas proteínas involucradas en el desarrollo de varias enfermedades relacionadas con la obesidad como la diabetes 2 o la patología cardiovascular. A medida que se gana peso, aumenta la proporción de macrófagos que activan cascadas de producción de sustancias proinflamatorias La obesidad causa un estado proinflamatorio crónico de bajo grado.[6] Los adultos que padecen sobrepeso y obesidad tienen marcadores séricos elevados de inflamación; estos incluyen proteína C reactiva, interleucina-6 y leptina. Estas proteínas (citoquinas) se derivan del tejido adiposo (grasa corporal), por ello son llamadas "adipoquinas". Los estudios clínicos han demostrado una correlación entre los niveles de adipoquinas y la pérdida de volumen del cartílago. Además, la leptina, una de las adipoquinas, es responsable de desencadenar un ciclo proinflamatorio intraarticular que contribuye a la descomposición del colágeno, lo que conduce al empeoramiento de la osteoartritis.[7] Esto puede explicar por qué la osteoartritis también se presenta en las articulaciones que no soportan peso de las personas que padecen obesidad, como el hombro y la mano. Mecanismos de daño biomecánico Los principales efectos biomecánicos de la obesidad en las articulaciones son la alteración de la marcha y el aumento del estrés articular. Esto, a su vez, provoca un aumento de la tensión en el cartílago articular y también puede provocar un aumento de la tensión en otros tejidos articulares, como el líquido sinovial, el hueso subcondral y las estructuras capsulares y ligamentosas. La relación entre la obesidad y el dolor bajo de espalda crónico progresivo es en parte explicada por la tensión biomecánica que la obesidad troncal ejerce sobre la columna dorsal inferior y la columna lumbar (Figura 1). La carga del peso que soporta la columna está en función de la masa del torso, así como la configuración geométrica del mismo. Las personas sanas al permanecer de pie llevan el peso del torso a través de la columna a la pelvis y el centro de gravedad del torso se encuentra delante de la columna creando un brazo de palanca que multiplica las fuerzas soportadas por la columna en posición neutral. Cuando el peso del torso aumenta y el torso se expande existe un aumento correspondiente en las fuerzas relacionadas al incremento de la carga axial en la columna y una migración progresiva del centro de gravedad, el cual se aleja más de la parte anterior de la columna.[8] Cuando la posición de la columna se altera por el exceso de grasa abdominal de tal manera que el torso se encuentra por delante de la pelvis o lateral a la pelvis, la columna está fuera de su posición neutral y las fuerzas que soporta la columna lumbar baja aumentan dramáticamente (Figura 2). Tanto el aumento de peso como la distribución geométrica anormal del peso, característica de la obesidad troncal, incrementa las fuerzas soportadas por la columna. Degeneración discal El desarrollo de la degeneración discal se puede atribuir a condicionantes genéticos, ambientales y al estilo de vida. De estos, el más importante es la obesidad, la cantidad de grasa corporal y su distribución. A pesar de que muchas personas pueden tener degeneración discal y no tener síntomas. Sin embargo estudios recientes confirman una asociación entre el grado de degeneración discal y dolor lumbar crónico. Como también existe relación entre la obesidad y el dolor lumbar crónico, es lógico pensar que un índice de masa corporal elevado sea un agente causal de degeneración que favorezca la presencia de dolor lumbar. Se ha observado que en relación a el estado proinflamatorio que provoca la obesidad, este efecto es mayor en varones que padecen obesidad respecto a las mujeres. Probablemente por el tipo de distribución de grasa en el varón, de predominio en tronco y abdomen. Esta acumulación de grasa en la zona abdominal es la que provoca un aumento de secreción de sustancias que producen cambios inflamatorios crónicos en el disco. La obesidad también implica un aumento de la carga mecánica en la columna vertebral por el exceso de peso que genera la carga sobre los discos vertebrales favoreciendo su degeneración. Otro efecto es la aterosclerosis, es decir, el depósito de grasa en las arterias. Esto causa desnutrición en las células del disco predisponiendo a su generación. Espondilosis multisegmentaria Ha sido demostrado que la obesidad es un factor independiente de riesgo para el desarrollo prematuro de espondilosis multisegmentaria. La espondilosis es un proceso de degeneración progresiva de los discos intervertebrales. Se va a asociar a una reacción ósea con la formación de osteofitos y deformación artrósica de la columna vertebral. Es la causa mas frecuente de compresión medular y radicular a nivel de columna cervical en personas mayores de 50 años. Los cambios radiográficos característicos en la IRM (Resonancia Magnética) incluyen disminución de la altura del espacio intervertebral y abombamiento del disco hacia el canal espinal. [9] Conclusiones y recomendaciones En base a la extensa información que se tiene y a la experiencia personal, recomendarle a nuestros pacientes bajar de peso, principalmente si el exceso de grasa corporal es de predominio abdominal, será crucial para mejorar el problema de dolor lumbar (sin mencionar problemas articulares en rodillas, caderas, etc.). Esto no excluye el continuo manejo de rehabilitación con el especialista en quiropraxia que en combinación con la pérdida de peso, ayudará a que la calidad de vida de nuestros pacientes sea la mejor que podamos brindarles. ¿Cuándo debe consultarnos? Si padece sobrepeso u obesidad y conjuntamente presenta dolor lumbar, dolor de cadera o rodillas. O bien algún otro problema relacionado con el sobrepeso y la obesidad como diabetes, hipertensión, colesterol y/o triglicéridos elevados, hígado graso, apnea del sueño, etc. REFERENCIAS 1. Garcia JBS, Hernandez-Castro JJ, Nunez RG, Pazos MA, Aguirre JO, Jreige A, et al. Prevalence of low back pain in Latin America: a systematic literature review. Pain Physician. octubre de 2014;17(5):379-91. 2. Russo M, Deckers K, Eldabe S, Kiesel K, Gilligan C, Vieceli J, et al. Muscle Control and Non-specific Chronic Low Back Pain. Neuromodulation J Int Neuromodulation Soc . enero de 2018;21(1):1-9. 3. Maher C, Underwood M, Buchbinder R. Non-specific low back pain. Lancet Lond Engl. 18 de 2017;389(10070):736-47. 4. Manchikanti L, Singh V, Falco FJE, Benyamin RM, Hirsch JA. Epidemiology of low back pain in adults. Neuromodulation J Int Neuromodulation Soc. octubre de 2014;17 Suppl 2:3-10. 5. Wearing SC, Hennig EM, Byrne NM, Steele JR, Hills AP. Musculoskeletal disorders associated with obesity: a biomechanical perspective. Obes Rev. 2006 Aug;7(3):239-50. 6. Kirichenko TV, Markina YV, Bogatyreva AI, Tolstik TV, Varaeva YR, Starodubova AV. The Role of Adipokines in Inflammatory Mechanisms of Obesity. Int J Mol Sci. 2022 Nov 29;23(23):14982. doi: 10.3390/ijms232314982. PMID: 36499312; PMCID: PMC9740598. 7. Poonpet T, Honsawek S. Adipokines: Biomarkers for osteoarthritis? World J Orthop. 2014 Jul 18;5(3):319-27. doi: 10.5312/wjo.v5.i3.319. PMID: 25035835; PMCID: PMC4095025. 8. White AA, Panjabi MM. Clinical Biomechanics of the Spine. Ch. 6. 2nd. Ed. Philadelphia, New York: Lippincot-Raven Publishers; 1990. 9. Sambrook PN, MacGregor AJ, Spector TD. Genetic influences on cervical and lumbar disc degeneration: a magnetic resonance imaging study in twins. Arthritis Rheum 1999; 42: 366-72.

  • Impacto de la obesidad en la presión arterial

    Cuando la presión arterial se eleva se desencadenan una serie de eventos que pueden poner en riesgo nuestra salud e incluso nuestra vida. Al aumentar la presión arterial, una parte de nuestro corazón llamada "ventrículo izquierdo" cuya función es bombear sangre a todo nuestro cuerpo empieza a engrosarse y esto aumenta el riesgo de infartos, insuficiencia cardiaca y muerte súbita. Los mecanismos involucrados en el aumento de la tensión arterial en pacientes que presentan sobrepeso u obesidad son diversos, lo que hace imprescindible que sea un médico especialista en obesidad el que los apoye. Mecanismos La obesidad es una enfermedad crónica, considerada un factor de riesgo importante en el desarrollo de enfermedad coronaria, hipertensión, insuficiencia y fallo renal. La obesidad contribuye al desarrollo de la hipertensión por mecanismos tales como: resistencia a la insulina e hiperinsulinemia, aumento de la actividad adrenérgica y de las concentraciones de aldosterona, retención de sodio y agua e incremento del gasto cardíaco, alteración de la función endotelial y factores hemodinámicos. Aún quedan abiertas muchas vías de investigación. En este artículo trataré de explicar cada uno de los mecanismos involucrados. Distribución de la grasa corporal La obesidad localizada preferentemente en el hemicuerpo superior (principalmente a nivel del abdomen) aquella a la cual llamamos "grasa visceral", se asocia a un aumento de morbi-mortalidad cardiovascular y mayor incidencia de enfermedades tales como diabetes mellitus (DM), hipertensión arterial (HTA), dislipemia (elevación de colesterol y triglicéridos), patología de la vesícula biliar y neoplasias (cáncer) [1, 2]. Resistencia a la insulina e hiperinsulinemia La obesidad abdominal se relaciona con concentraciones de insulina altas en ayunas, así como posterior a la administración de glucosa (condición que aumenta la incidencia de DM tipo 2). Ello se debe a la acumulación de células abdominales lipolíticas hiperactivas que liberan cantidades de ácidos grasos libres hacia la vena porta (vaso sanguíneo que transporta la sangre desde los intestinos, el bazo, el páncreas y la vesícula biliar hasta el hígado), incrementando la síntesis de triglicéridos e inhibiendo la captación de insulina, con aparición de resistencia a la insulina e hiperinsulinemia [3,4]. Sistema nervioso simpático El aumento de la actividad del sistema nervioso simpático (principalmente norepinefrina) es un mecanismo que tiende a darse desde el inicio y participa en el mantenimiento de la presión arterial elevada. De hecho, la actividad del sistema nervioso simpático produce hipertrofia ventricular izquierda (crecimiento del ventrículo) y contribuye a la génesis de arritmias ventriculares y, con ello, muerte súbita. La acción vasoconstrictora del SNS en los vasos sanguíneos del músculo esquelético reduce la absorción de glucosa por parte del músculo, favoreciendo la resistencia a la insulina e hiperinsulinemia [1]. Sistema renina-angiotensina-aldosterona Participa regulando la vasoconstricción y el equilibrio del volumen del liquido que se encuentra fuera de las células. La obesidad se asocia a un aumento de los niveles de aldosterona y alteración de la relación angiotensina II- aldosterona, aumentando la cantidad corporal de sodio y agua, y por tanto favoreciendo el aumento de la presión arterial en pacientes con obesidad. Función endotelial alterada El endotelio es el tejido que reviste el interior de los vasos sanguíneos y el corazón. En el endotelio en condiciones normales, se produce el Oxido Nítrico, el cual es el vasodilatador endógeno más potente. Interviene en la regulación del tono vascular, inhibición de la agregación y adhesión plaquetaria e inhibe la proliferación de células musculares (que favorece el engrosamiento de los vasos sanguíneos) [5]. Estudios llevados a cabo en pacientes hipertensos con sobrepeso y obesidad, han mostrado que presentan una alteración de la respuesta vasodilatadora a los estimulantes del Oxido Nítrico, pudiendo deberse a una reducción en su síntesis y a un incremento en su descomposición en Superóxido [6]. Sensibilidad al sodio y volumen plasmático Los mecanismos a través de los cuales se origina la retención de sodio podrían estar en relación con los efectos combinados de la resistencia a la insulina con mayor o menor grado de hiperinsulinismo y con la hiperactividad simpática. El aumento de calcio intracelular en las células musculares lisas de las arterias por disminución de la ATPasa Na-K (bomba de intercambio iónico en la membrana celular "sodio-potasio"), puede dar lugar a hipertensión arterial, al inducir incremento del tono muscular y la resistencia periférica. Algunos investigadores señalan que existe una excreción de sodio normal o ligeramente elevada en pacientes con obesidad relacionándola con la hipertensión arterial asociada a la obesidad [7]. Factores hemodinámicos En los pacientes que padecen obesidad, el gasto cardíaco (cantidad de sangre bombeada cada minuto por cada ventrículo), la volemia central (volumen sanguíneo dentro del tórax) y total (volumen sanguíneo que circula en una persona) y el volumen sistólico son mayores que en personas que no padecen obesidad [8]. El gasto cardíaco es proporcional al incremento de la masa corporal, es decir, a mayor volumen y masa corporal aumenta el volumen de sangre bombeado por el corazón, y puede ser una de las razones principales del aumento de la presión arterial [7]. Por otro lado, en los pacientes que padecen obesidad, nos encontramos con un estado protrombótico (propensión a formar coágulos dentro de los vasos sanguíneos), secundario al estasis venoso (provocado por la disminución del flujo venoso por compresión externa de la grasa corporal) y disminución de la actividad física entre otros, que contribuye al aumento de la presión arterial. Daño renal Los riñones del paciente que padece obesidad están cubiertos por una capa de grasa que penetra en el hilio renal rodeando la médula [1], originando un aumento del depósito de células intersticiales y de la matriz extracelular entre los túbulos, que induce un aumento de la presión hidrostática intersticial y de la reabsorción tubular de sodio. Las consecuencias son un aumento de flujo renal, filtrado glomerular y albuminuria, con posibilidad de daño renal y afectación en la presión arterial. En resumen Los cambios que existen en un paciente que padece obesidad en el volumen de sangre circulante, la resistencia que existe en la circulación de la sangre provocada tanto por la contracción constante del músculo liso arterial como por la compresión externa provocada por la grasa corporal, alteraciones en la retención del sodio y del liquido extracelular, la afectación de la función del oxido nítrico que es un vasodilatador natural y la alteración en el metabolismo de la insulina son factores que contribuyen a la elevación de la tensión arterial en nuestros pacientes. Tratamiento Siempre deberá ser llevado de la mano de un médico especialista. El manejo con medicamentos en un paciente que padece obesidad e hipertensión debe ser especifico, no cualquier medicamento antihipertensivo podrá ser utilizado en una persona que padece sobrepeso u obesidad. ¿Bajar de peso ayuda al control de la tensión arterial? El descenso de peso es el mejor tratamiento para la hipertensión arterial. La reducción de 1 kg de peso corporal se acompaña de la reducción de 1 mm Hg en los valores de Tensión Arterial. Existen evidencias que la pérdida de peso es importante en el tratamiento de la hipertensión arterial, tanto así que la American College of Cardiology, American Heart Association, European Society of Cardiology y la European Society of Hypertension Blood Pressure/Hypertension incluyen en su guía para el manejo de la hipertensión del año 2022 la reducción del peso corporal como parte fundamental en el manejo de la hipertensión. La prevención del sobrepeso puede tener un gran impacto en la prevención de la hipertensión y de la enfermedad cardiovascular en la población general. ¿Cuándo debe consultarnos? Si padece sobrepeso u obesidad y ha observado que su tensión arterial se encuentra por arriba de la cifra 129/84 en más de 3 ocasiones o bien presenta alguno de estos síntomas: Dolor intenso de cabeza Dolor en el pecho Mareos Dificultad para respirar Náuseas Vómitos Visión borrosa o cambios en la visión Ansiedad Confusión Pitidos en los oídos Hemorragia nasal Cambios en el ritmo cardiaco REFERENCIAS 1. Kannel WD, Anderson K, Wilson PWF. Secular blood pressure trends in normotensive persons: the Framingham study. Am Heart J 1993; 125: 1154-1158. 2. Pouliot MC, Dépres J-P, Lemieux S, Moorjani S, Tremblay A, Nadeau A et al. Wiast circunference and abdominal sagital diameter: best simple anthropometric indexes of abdominal visceral adipose tissue accumulation and related cardiovascular risk in men and women. Am J Cardiol 1994; 73: 46-468. 3. Vera O, Velasco M, Carballo J, Flores E, Espinoza M, De la Parte M et al. Insulinemia: relationship with obesity and high blood pressure. Am J Hypertens 2002; 15: A187. 4. Baron AD, Brechtel-Hook G, Johnson A, Fineberg N, Henry DP, Steinberg HO. Interactions between insulin and norepinephrine on blood pressure and insulin sensitiviy. J Clin Invest 1994: 93: 2453-2462. 5. Fhigashi Y, Sasaki S, Nakgawa K, Matsuura H, Chayama K, Oshima T. Effect of obesity on endothelium-dependent, nitric oxide-mediated vasodilation in normotensive individuals and patients with essential hypertension. Am J Hypertens 2001; 14: 1038-1045. 6. Rees DD, Palmer RMJ, Moncda S. Role of endothelium-derived nitric oxide in the regulation of blood pressure. Proct Natl Acad Sci USA 1989; 86: 3375-3378. 7. Hall J, Brands M, Dixon W, Smith MJ. Obesity-induced hypertension: renal function and system hemodynamic. Hypertension 1993, 22: 292-299. 8. Oren S, Grossman E, Frohlich ED. Arterial and venous compliance in obese and nonobese subjects. Am J Cardiol 1996; 77: 665-667.

  • Apnea del sueño y obesidad ¿Conoce a alguien que ronca cuando duerme?

    ¿Cuántas personas conoce que roncan mientras duermen? Probablemente a más de una y es que las causas por las cuales roncamos pueden ser diversas, como la posición al dormir, algún problema nasal o el consumo de alcohol, sin embargo existe una causa que puede no solo provocar que la persona ronque sino que haga pausas en sus respiración y con ello se generen diversas complicaciones, estamos hablando de la obesidad. Las personas con sobrepeso presentan un aumento de tejido adiposo en la parte posterior de la garganta que bloquea el flujo del aire, induciendo al paciente a la apnea del sueño. ¿Qué es la apnea del sueño? La apnea del sueño es una enfermedad caracterizada por interrupciones y reducciones en la respiración durante las horas de sueño. Estas se pueden asociar a episodios de desaturación de oxígeno y fragmentación de los ciclos del sueño. Hoy por hoy se considera la apnea del sueño como un factor de riesgo cardiovascular importante ya que intervienen en la evolución y desarrollo de hipertensión, arritmias, enfermedad cardiovascular y cerebrovascular así como también se asocia con un aumento en la tasa de accidentes de vehículos a motor y transporte público. Relación de la apnea del sueño y la obesidad Aun cuando la apnea del sueño obedece a múltiples causas, la obesidad constituye uno de sus principales factores ya que el exceso de tejido graso tiende a depositarse en las paredes musculares del istmo faríngeo, el cual a su vez es el sitio donde ocurre la mayoría de las veces el colapso de la vía área, ocasionando los episodios de cese respiratorio. Así mismo, la apnea del sueño ocasiona un estrés metabólico con alteración de ciertas moléculas (leptina, grelina, entre otras) que ocasionan un aumento del apetito terminándose de convertir en un círculo vicioso donde la obesidad genera mayor apnea y a la apnea no facilita la reducción de peso [1]. Síntomas de la apnea del sueño Los síntomas pueden ser variados e incluyen los siguientes: Somnolencia diurna excesiva Ronquidos fuertes Episodios observados de pausas en la respiración durante el sueño Despertar brusco con jadeo o atragantamiento Despertar con la boca seca o con dolor de garganta Dolor de cabeza por la mañana Dificultad para concentrarse durante el día Cambios del estado de ánimo, como depresión o irritabilidad Presión arterial alta Disminución de la libido Complicaciones La apnea obstructiva del sueño se considera una afección médica grave. Las complicaciones pueden ser las siguientes: Fatiga y somnolencia diurnas Al no poder conciliar el sueño por la noche, las personas con apnea obstructiva del sueño suelen tener una gran somnolencia diurna, fatiga e irritabilidad. Pueden tener dificultad para concentrarse y quedarse dormidos en el trabajo, mientras ven la televisión o incluso mientras conducen. Esto puede hacer que corran un mayor riesgo de sufrir accidentes laborales. A los jóvenes con apnea obstructiva del sueño les puede ir mal en la escuela y comúnmente tienen problemas de atención o de conducta [2, 3]. Problemas cardiovasculares El descenso repentino de los niveles de oxígeno en la sangre que ocurre durante la apnea obstructiva del sueño aumenta la presión arterial y sobrecarga el aparato cardiovascular. Muchas personas con apnea obstructiva del sueño desarrollan presión arterial alta (hipertensión), lo cual puede aumentar el riesgo de enfermedad cardíaca. Mientras más grave sea la apnea obstructiva del sueño, mayor será el riesgo de enfermedad arterial coronaria, ataques cardíacos, insuficiencia cardíaca y accidentes cerebrovasculares. La apnea obstructiva del sueño aumenta el riesgo de ritmos cardíacos anormales (arritmias), que pueden reducir la presión arterial. Si hay una enfermedad cardíaca subyacente, estos múltiples episodios reiterados de arritmias podrían llevar a la muerte súbita. Igualmente se ha observado de manera independiente de otros factores de riesgo, que la apnea del sueño puede ser causa de accidente vascular cerebral [2, 3]. Complicaciones con medicamentos y cirugía La apnea obstructiva del sueño también plantea problemas con determinados medicamentos y anestesia general. Estos medicamentos, como sedantes, analgésicos narcóticos y anestésicos generales, relajan las vías respiratorias superiores y pueden empeorar la apnea obstructiva del sueño. Si tienes apnea obstructiva del sueño, puedes presentar problemas respiratorios peores después de una cirugía mayor, en especial, después de estar sedado y acostado boca arriba. Las personas con apnea obstructiva del sueño pueden ser más propensas a sufrir complicaciones después de la cirugía. Antes de someterte a una cirugía, dile al médico que padeces apnea obstructiva del sueño o síntomas relacionados con la afección. Es posible que tu médico quiera que te sometas a una prueba de apnea obstructiva del sueño antes de la cirugía [2, 3]. Problemas oculares Algunas investigaciones han detectado una conexión entre la apnea obstructiva del sueño y ciertas afecciones oculares, como el glaucoma. Por lo general, las complicaciones oculares se pueden tratar [2]. Pareja privada de sueño Los ronquidos fuertes pueden impedir el descanso a las personas que te rodean, y, a la larga, perjudicar tus relaciones. Algunas parejas pueden elegir dormir en otra habitación [2]. ¿Cuándo debe consultar con un médico? Cambios en el estilo de vida y la alimentación pueden marcar una diferencia muy grande cuando una persona presenta síntomas relevantes [4, 5]. Consulte a un profesional médico si presenta, o si su pareja observa, lo siguiente: Ronquidos suficientemente fuertes como para interrumpir el sueño de otros o el suyo Despertarse jadeando o atragantándose Pausas en su respiración durante el sueño Tener somnolencia diurna excesiva, que puede causar que se quedes dormido trabajando, mirando televisión o incluso conduciendo un vehículo Si padece sobrepeso u obesidad y algunos de los síntomas mencionados, contáctenos, nosotros podemos ayudarle. REFERENCIAS 1. Meurling IJ, Shea DO, Garvey JF. Obesity and sleep: a growing concern. Curr Opin Pulm Med. 2019 Nov;25(6):602-608. [Pub Med] 2. Crummy F, Piper AJ, Naughton MT. Obesity and the lung: 2. Obesity and sleep-disordered breathing. Thorax. 2008 Aug;63(8):738-46. [Pub Med] 3. Masa JF, Pépin JL, Borel JC, Mokhlesi B, Murphy PB, Sánchez-Quiroga MÁ. Obesity hypoventilation syndrome. Eur Respir Rev. 2019 Mar 14;28(151):180097. [Pub Med] 4. Wood GC, Bailey-Davis L, Benotti P, Cook A, Dove J, Mowery J, Ramasamy A, Iyer N, Smolarz BG, Kumar N, Still CD. Effects of sustained weight loss on outcomes associated with obesity comorbidities and healthcare resource utilization. PLoS One. 2021 Nov 3;16(11):e0258545. [Pub Med] 5. Wilson K, St-Onge MP, Tasali E. Diet Composition and Objectively Assessed Sleep Quality: A Narrative Review. J Acad Nutr Diet. 2022 Jun;122(6):1182-1195. [Pub Med]

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