La obesidad puede provocar problemas a nivel articular por 2 vías: la mecánica y la inflamatoria.
Por el lado mecánico, podemos explicarlo de una forma muy simple, el daño generado por el peso que sostienen articulaciones como cadera, rodilla y tobillo.
Por otro lado, los procesos inflamatorios (mediados por citoquinas) que se encuentran anormalmente elevados en pacientes con sobrepeso y obesidad, pueden generar un daño constante en diversos órganos así como también en las articulaciones.